Cartas a Eugene Green I

Querido Eugene Green,

Cuando era pequeña hacía listas con las cosas más importantes del día. Lo solía hacer en días en los que pasaban, claro está, cosas que consideraba importantes.

Creo que hoy voy a empezar con el encuentro con un profesor que tube en la ESO. Se llamaba Juan Ramón y le llamábamos Juanra. Era un auténtico desastre, un profesor malísimo. No comunicaba nada bien y no dejaba de jugar con unas llaves que tenía en el bolsillo haciendo ruiditos mientras nos daba la chapa con algo de sociales.

Yo era una chula. Muy chula por lo poco lista que era, creo. Luego se me pasó, pero durante mucho tiempo vacilaba a todo el profesorado con el que me veía capaz de vacilar y eso le incluía a él. Una vez saqué un 10 redondo en un exámen y fui la única de la clase. Me invitó a su despacho y me preguntó que porqué me portaba tan mal, con lo buena estudiante que era. Yo no era muy muy buena, fue un exámen que estudié bien y ya. Y eso mismo le dije yo aquel día.

Hoy hemos ido a la filmo con Marc a ver una de tus pelis (ayer vimos otra y el miércoles fui yo sola a ver tu última) y al salir ponían otra y hemos decidido volver a entrar. Al acabar la segunda peli, yo estaba con los ojos hinchadísimos de llorar, de creer. De repente, desde atrás, me llama un señor por mi nombre: "¿eres Júlia Betri(an?". Me giro y le digo que sí. Me dice "¿me recuerdas?" Y yo le digo que no, pero que su cara me suena mucho. Y antes de que me dijera su nombre, sólo por la voz lo he reconocido y le he dicho "Ets el Juanra de socials!". Corriendo, le he preguntado si aún era profesor y gracias a dios, me ha dicho que no. Es arqueólogo desde hace mucho años. Luego me he intentado salvar de la pregunta: i tu què fas? y le he preguntado si conocía tu cine. 

Ha sido muy bonito porque se le han puesto unos ojos muy tiernos hablando de que le había recordado a un viaje que hizo a Lisboa a los tres años, con su família. Ahora que lo pienso, quizás es huérfano y la peli le ha devuelto la fe en el futuro, como a Vasco en la peli. A lo mejor su problema era el amor y se ha vuelto a enamorar gracias a la religiosa portuguesa. A lo mejor me ha visto salir del cine y me ha recordado con menos odio del que debía tenerme cuando me conoció con 14 años. A lo mejor nunca me odió, sólo quería ser arqueólogo y sacar las llaves del bolsillo para llegar a su casa pronto y ver alguna película buena.